Una cultura de innovación.
California siempre se ha considerado un centro de progreso que promueve la innovación, además de esforzarse por proteger los abundantes recursos naturales y la belleza escénica del estado. En 2006, California estableció las primeras regulaciones integrales sobre gases de efecto invernadero en los Estados Unidos, con objetivos más ambiciosos que muchos signatarios del Acuerdo de París. Desde entonces, el estado ha continuado sus esfuerzos, que incluyen prohibir la venta de nuevos automóviles de gasolina en 2035 y proponer la primera ley en su tipo que exige a las compañías grandes divulgar sus emisiones de gases de efecto invernadero y riesgos climáticos.
También hogar de Silicon Valley y la quinta economía más grande del mundo, el creciente entorno de California es uno de los más regulados en el mundo, con estrictas leyes federales y estatales que protegen el medioambiente, la seguridad de los trabajadores y la seguridad alimentaria. Los agricultores y procesadores de almendras de California acatan estas regulaciones, con un gran número de iniciativas de la industria que abarcan mucho más que solo estos requisitos a medida que la industria busca ser parte de la solución.